lunes, 26 de mayo de 2008

"Morirás a medianoche", de Lamberto Bava


FICHA ARTÍSTICA:

Título Original: "Morirai a Mezzanotte"/ Dirección: Lamberto Bava/ Guión: Dardano Sachetti y L. Bava/ Producción: Massimo Manasse, Marco G. Spina y L.Bava/ Fotografía: Gianlorenzo Bataglia/ Montaje: Lamberto Bava/ Música: Claudio Simonetti/ Efectos de Maquillaje: Amedeo Alessi/ Reparto: Valeria D'Obici, Leonardo Treviglio, Paolo Malco, Lara Wendel, Lea Martino, Eliana Miglio, Barbara Scoppa, Massimiliano Baratta, Loredana Ramito. Italia. 1986. COLOR, 84'

Lo bueno de que te guste el cine de este hombre es que sus películas casi siempre tienen un acabado muy similar, fluctuando entre lo correctillo y lo mediocre, con algún hallazgo puntual. Con ello, se produce una doble consecuencia: si te gusta una, te gustan casi todas. Y por el lado negativo, cuando llevas vistas unas cuantas, llegas a la conclusión de que jamás será capaz de ofrecer nada realmente bueno. Pero bueno, para eso está la obra de su progenitor.

En el caso de la película que nos ocupa, podríamos situarla en el casillero de las correctas. Se trata de un híbrido entre giallo y slasher, seguramente con más vocación de lo primero, pero mayoritariamente con regusto final de lo segundo.
En todo caso, "Morirás a medianoche" es un "lamberto" puro. Con toda la serie de incongruencias típicas de sus guiones (el inefable Dardano Sachetti está detrás del mismo), con abundancia de diálogos tontorrones y con un elenco de actores que van de lo justito a lo lamentable.

En cuanto al argumento, poco de original encontramos. Una serie de asesinatos cometidos por un psicópata que (teóricamente) murió hace años, pero que parece haber vuelto de la tumba para seguir su trayectoria criminal. A partir de ahí, el clásico policía guapetón y durillo, en este caso con su hija como víctima potencial y la ayuda de una criminóloga, intentarán capturar al asesino. Mientras tanto, toda clase de asesinatos con más o menos estilo y la duda de si se trata realmente del "muerto" que ha vuelto, o de alguien que ha asumido su personalidad.


A pesar de no tratarse de una película con nada especialmente destacable, sí merece la pena resaltar el buen ritmo que posee, haciendo que la narración discurra sin baches ni tiempos muertos. Por ahí, nada que reprochar.

Por otro lado, Bava Jr. parece empeñado de manera especial en homenajear a los giallos clásicos de su padre, situando los asesinatos en lugares llamativamente significativos: teatros, tiendas con maniquíes, hoteles desiertos, casas caprichosamente diseñadas, etc. En algunos casos, dichas opciones están metidísimas con calzador, pero si no somos muy exigentes, hasta podemos llegar a contemplarlas como guiños simpáticos. Es en aspectos como ése donde se advierte la mencionada vocación de giallo del filme. En todo caso, no nos engañemos, los genes del esteticismo visual, se perdieron por el camino.

Asimismo, se echa de menos algo más de sanguinolencia, puesto que sabido es que don Lamberto suele ser bastante generoso en ese capítulo, a falta de otras capacidades. En cambio aquí, se decanta por ser más contenido, en dicho aspecto. Mala suerte.

Así pues, como valoración general, un aprobado para la película. Inclusive con algún que otro plano sorprendentemente conseguido y que posee la virtud de darte exactamente lo que esperas de ella, cuando te sientas a verla. No tiene el carisma ni el buen tono de "Demons" o "Macabro", pero tampoco alcanza el ínfimo nivel de "Efectos sobrenaturales" o "La cena con el vampiro".

2 comentarios:

Ruestes dijo...

Curioso director. Desde Macabro, una obra redonda, siguió siempre en trayectoria descendente. El propio Lamberto dicen que rechazo el resultado de esta diciendo que era horrible y que él, en principio, hizo una peli para la TV pero que su productor fue quien se empeñó en estrenarla en los cines. Yo también la encuentro salvable, de ese grupo de pelis que hizo entre Macabro y Demons, sin duda lo mejor.

Abuelo Igor dijo...

A mí también me gustaba "Cuchillos en la oscuridad", que hasta tomaba elementos de "Impacto" de Brian de Palma, logrando así que la idea argumental, que el americano había tomado, modificada, de "Blow up", volviese a Italia.

También vi otra de Lamberto que se llamaba "Crímenes en portada", en donde la cámara subjetiva del asesino veía a sus víctimas femeninas con cabeza de insecto y donde el nunca bien ponderado Luigi Montefiori/George Eastman cumplía un rol de galán.