sábado, 25 de abril de 2009

"Madman", de Joe Giannone


FICHA ARTÍSTICA:

Título Original: "Madman"/ Dirección y Guión: Joe Giannone/ Producción: Gary Sales/ Fotografía: James Lemmo/ Montaje: Daniel Loewenthal/ Música: Stephen Horelick/ Efectos Especiales: Matt Vogel/ Reparto: Gaylen Ross, Tony Fish, Harriet Bass, Seth Jones, Jan Claire, Alexander Murphy Jr., Jimmy Steele, Carl Fredericks, Michael Sullivan, Paul Ehlers, Tom Veilleux, Stephen Clark. USA, 1982. Color. 87'

Más o menos típico slasher ochentero, variedad "campamentos", dirigido y guionizado por Joe Giannone. Un director tan efímero y fugaz, que de hecho "Madman" constituyó su primera y última película, falleciendo bastantes años después de realizarla, concretamente en el 2006.

En ella no encontraremos casi nada que la diferencie en exceso de productos similares. Y sin embargo, sí es obligado resaltar que la narración presenta alguna que otra novedad digna de mención.

Sobretodo el hecho de que, a diferencia de lo que suele ser habitual en esta clase de filmes, en que los personajes llegan al sitio donde tendrán lugar los acontecimientos terroríficos poco a poco, se asientan y hasta que empieza a desencadenarse la acción puede pasar un espacio de tiempo que irá de lo prudencial a lo excesivo, por contra Giannone opta por iniciar su relato en pleno clímax terrorífico.

De este modo, en la primera sencuencia, nos encontramos en plena hoguera de campamento, alrededor de la cual tiene lugar la exposición de la leyenda que ilustra la existencia (o no) del presunto monstruo: el Madman, en cuestión. Con ello, nos ahorramos prolegómenos tópicos y nos encontramos de lleno metidos en harina, porque ciertamente el nivel de tensión de ese inicio resulta bastante conseguido.


Ahora bien, a partir de ese momento, sí tendrán lugar los consabidos pasajes narrativos más o menos de relleno, en que los personajes serán debidamente presentados, en la que es su última noche de campamento. Aunque sea un dato sin excesiva importancia, ello sí constituye un rasgo diferencial: el hecho de que el meollo del horror tenga lugar al final del viaje.

Por supuesto, poco después empezarán los asesinatos, descritos sin demasiada virulencia, pero tampoco asépticos. Es decir, un nivel más o menos mediano de truculencia.

En cualquier caso, seguramente lo que más cabe destacar del filme es la atmósfera que transmite el escenario del bosque donde el ser misterioso comete sus fechorías. Un ser que, del mismo modo, no se nos presenta de un modo diáfano hasta el final, contribuyendo ello a un mayor nivel de desconocimiento, en cuanto a su verdadera naturaleza (humana o no). Asimismo, la progresión narrativa está bien cuidada, elevándose el tono inquietante, a medida que avanza el relato, tras el mencionado arranque.

De todos modos, se trata de un filme modesto, con un nivel interpretativo tirando a bajo y que tampoco escapa de la habitual serie de tópicos y de situaciones de guión previsibles y forzadas. Sin ir más lejos, la capacidad del asesino para trasladarse por el bosque de un modo que ni siquiera la velocidad de los coches puede superar. Él parece estar siempre en todas partes, da lo mismo hacia dónde se dirijan las potenciales víctimas (alguna de las cuales, por cierto, posee una pericia más bien nula, a la hora de buscar escondrijos).

Por tanto, película recomendable para aficionados al slasher medianejo, sin nada demasiado destacable, pero con un acabado tan correcto como poco exigente. Básicamente para ver por completismo.

3 comentarios:

Igor Von Slaughterstein dijo...

¡Ah! Esos campamentos nocturnos en los que contar historias de terror. Que grandes.

Saludos!!

Marta Simonet dijo...

Tengo ganas de leer cositas en tu jardín (del naúfrago claro).


Un saludo :)

Rey Nova dijo...

Había visto este titulo en muchas referencias al género, pero hasta ahora no me animaba a verlo. A ver si le doy un tiempo, porque veo que es un esfuerzo modesto.