martes, 4 de noviembre de 2008

"Dead Men Walking", de Peter Mervis


FICHA ARTÍSTICA:

Título Original: "Dead Men Walking"/ Dirección: Peter Mervis/ Guión: Mike Watt/ Producción: David Michael Latt, David Rimawi y Sherri Strain/ Fotografía: Mark Atkins/ Montaje: Peter Mervis/ Música: Mel Lewis/ Efectos Especiales: Kelly Swearingen/ Reparto: Bay Bruner, Griff Furst, Chriss Anglin, Bobby James, Brandon Stacy, James Ferris, Scott Carson, Charles Schneider, Deadlee. USA, 2005. Color. 82'

Ojito con esta película, porque salpica. Si llegó a estrenarse comercialmente en salas, cosa que ignoro por completo, una buena forma de ambientar las proyecciones hubiese sido repartir baberos junto con las entradas.

Y sí, es la enésima de zombies/infectados (tanto monta) con hipervelocidad y tope enrabietados. Con el añadido de que la acción se sitúa en el ámbito de una prisión de máxima seguridad, en la que presos y vigilantes rivalizan al respecto de cual de ellos resulta ser más macarra. Todo ello bajo la atenta mirada de un alcaide con una llamativa pinta de golfista dominguero.

Todo empieza con la llegada de un nuevo interno, al parecer aquejado de una extraña enfermedad, que se manifiesta en forma de agresividad extrema y que no tardará en contagiar al resto de la población reclusa, provocando disturbios sin fin. Mientras tanto, una enviada gubernamental tratará de hacer frente al problema con la ayuda de los miembros del personal de seguridad que, dado su mencionado carácter cafre, serán más obstáculo que apoyo. El clima de violencia y horror irá in crescendo hasta el final.

En "Dead Men Walking", el director (y montador) Peter Mervis pone toda la carne en el asador, a la hora de exhibir toda clase de sanguinolencia y "visceralidad". Con una cámara todavía más histérica que los propios infectados y una dirección muy discreta, a pesar de un loable (aunque no especialmente conseguido) intento por construir personajes con una mínima enjundia.


Ello no resulta especialmente logrado, como digo, sobretodo a causa del mediocre nivel actoral de la mayoría de los intérpretes. Empezando por el propio alcaide de la prisión que, como ha quedado dicho, parece cualquier cosa menos eso. Da más bien la imagen de ser algo así como un cuñado del director, que pasaba por allí y se apuntó a la fiesta a última hora. Por otro lado, los propios extras del filme, es decir, la mayoría de población reclusa de la cárcel, muestran una "coreografía" y un modo de desenvolverse en pantalla francamente torpe y poco verosímil. De hecho, la inmensa mayoría del reparto parece formada por intérpretes amateurs.

Por lo demás, el hecho de que la trama se desarrolle a lo largo del noventa y nueve por ciento del tiempo de metraje en un escenario único y recurrente (entre los muros de la prisión), para tan sólo salir al exterior en los últimos minutos del filme, acaba resultando excesivamente cansino para el espectador. Máxime cuando el nivel de truculencia desde los primeros momentos es prácticamente el mismo. Acaba saturando, no por la cantidad de gore, sino por lo repetitivo de los efectos donde éste se manifiesta.

Así, tras unos primeos escarceos pródigos en vomitonas sanguinolentas y de toda índole (de ahí la alusión a las salpicaduras y los baberos del principio), empezarán las mordeduras propiamente dichas y las carreras a lo largo y ancho de los pasillos y las estancias, hasta cubrir los ochenta minutillos de rigor, que se rematarán con un final previsible y rutinario.

Poco o nada aporta "Dead Men Walking" a la nómina de filmes con infectados violentos, tan en boga en los últimos años. Ni en las formas, ni en el fondo. Aunque no sería justo eludir su carácter desenfadado y carente tanto de pretensiones, como de tiempos muertos, narrativamente hablando. Eso sí, estamos hablando de un subproducto en toda regla, cosa que no hay que perder de vista en ningún momento.

1 comentario:

ATXEIN dijo...

Pues me ha llamado la atencion..creo que caera pronto..gracias por la "recomendación"...XDDDD

Saludos¡